Respiros
“A pasos pequeños, hoy me toca una vez más entender y seguir aprendiendo porque las cosas no se deben consumir de forma ilimitada...”
El espacio entre un domingo y el siguiente, hoy me parece eterno. La semana es la pausa de los Remedios y los Remedios la pausa de la semana. Ambas me recuerdan que como todo, más vale tener espacio para tomar un respiro de las cosas, para no cansarnos rápidamente de ninguna de ellas. Es decir, aprender a sostenerlas en el tiempo. Constancia señorita, constancia. A paso lento pero seguido.
Para mí eso muchas veces resulta un tanto difícil, paso la mayoría de la vida en los extremos del péndulo. Cómo me dijo mi mamá hace unos días, “tenés una intensidad para asumir cualquier cosa en esta vida, te metés tan de lleno, te ilusionás de tal forma con los proyectos en que te involucrás, que rápidamente estos te drenan toda tu energía y quedás sin combustible”, o en otras palabras, los vuelvo insostenibles en el tiempo.
En tiempos de tanta restricción, los espacios que comparto con otras personas son escasos. La verdadera mala noticia es que he comenzado a implementar mi método péndulo a ellos. Son tan cortos, tan limitados que intento aprovechar cada segundo de ellos. Todo para volver a casa y como una junkie del contacto social, caer en un bajón emocional en la ausencia de ellos.
A pasos pequeños, hoy me toca una vez más entender y seguir aprendiendo porque las cosas no se deben consumir de forma ilimitada, pues más que remedio, una dosis no adecuada de algo que queremos, se puede convertir en el propio mal.
[Remedios del Trópico - Edición Dominical #3 - 30 de agosto]
